El valor de compartir experiencias entre países mineros

Conn más de 1.300 visitantes y participantes de más de 30 países se realizó este año la Exposición Latinoamericana para la Minería Mundial (Expomin), la más grande en su rubro a nivel latinoamericano y la segunda en el mundo. Se trata de una instancia que ha adquirido gran relevancia, posicionándose como una excelente oportunidad para revisar el estado de la industria minera nacional.

Hemos visto a esta feria crecer, convocar y convertirse en un gran espacio de encuentro para todos quienes hacemos de la minería una forma de trabajo y de vida.

Asimismo, nos ha brindado un valioso espacio para resaltar el aporte de la minería al desarrollo económico y social de Chile. Nuestra industria es, de hecho, el pilar más sólido en que se sustenta el crecimiento del país. Su inversión genera un relevante impacto multiplicador y nos convierte, a nivel mundial, en una verdadera potencia minera.

En la edición de este año, la decimocuarta, pudimos compartir visiones sobre un escenario más complejo, caracterizado por la caída en los precios de los metales y la desaceleración de la economía mundial.

A nivel nacional, los expertos constataron cómo la baja en el valor del metal ha impactado a las empresas mineras de todos los tamaños, disminuyendo ingresos, reduciendo márgenes, paralizando o postergando la inversión, recortando el empleo y moderando las expectativas de los accionistas. De hecho, la minería es la actividad económica donde se manifiesta con mayor fuerza la baja en la ocupación.

Se hizo hincapié en algunas de las tareas claves que debemos seguir como sector productivo: controlar los costos, optimizar los procesos productivos y de gestión, capacitar permanentemente a los trabajadores y continuar con la innovación.

En el evento, también tuvimos el honor de recibir a líderes gremiales de siete países para compartir conocimientos en el seminario “Minería en América”. Representantes mineros de Canadá, Ecuador, Perú, Argentina, Brasil, Colombia y México expresaron preocupaciones en común, como la recuperación económica, los acuerdos de gobernabilidad, la elaboración de nuevos proyectos y fórmulas para minimizar costos.

Se enfatizó, asimismo, la importancia de la competitividad y de la productividad. Valoramos estos encuentros por el aporte que resulta de ellos y porque nos permite compartir y apreciar otras realidades con un denominador común: ser la palanca de desarrollo de nuestros pueblos y promover la colaboración entre el sector privado y el público.

Se trata de una mirada de largo plazo que, como SONAMI, siempre nos hemos preocupado de promover, y así lo seguiremos haciendo.

Alberto Salas, presidente de SONAMI